El sobrepeso en los niños

La obesidad infantil es uno de los grandes males de la población en la actualidad. Es uno de los temas relacionados con la alimentación que más preocupa a los padres pues puede desencadenar graves problemas para la salud de los niños, tanto físicos como psicológicos. Desde enfermedades cardiovasculares o diabetes a trastornos en su desarrollo psicológico.

 

Una dieta equilibrada es la base de una buena alimentación. Los padres somos los encargados de inculcar en los niños una correcta alimentación y a veces somos nosotros los primeros que tenemos que cambiar el chip. Siguiendo las pautas de la pirámide de alimentos para niños estarán cubiertas sus necesidades nutricionales.

 

El ejercicio, junto con una dieta equilibrada, es clave para evitar la obesidad infantil. Es determinante a la hora de prevenirla. Los expertos recomiendan al menos 15 minutos de actividad física moderada o intensa para mantener alejado el sobrepeso. La pirámide de actividad física para niños aconseja moverse cada día, realizar de 3-5 veces por semana al menos 20 minutos de ejercicio.

 

Es necesario cambiar nuestros propios hábitos para tener hijos más sanos. Si los niños nos ven inactivos y alimentándonos de forma incorrecta no estamos dando un buen modelo en el que reflejarse. De nada sirve el “haz lo que yo digo, pero no lo que yo hago”. Debemos dar un buen ejemplo y seguro que nos beneficiaremos todos. Hacer ejercicio en familia es algo muy aconsejable.

 

 

Es importante compartir la mesa con los hijos al menos una vez al día tanto para controlar lo que comen como para hacer de la hora de la comida un momento agradable y relajado. Es además un ejercicio ideal para potenciar la comunicación familiar y atender las necesidades personales de cada miembro de la familia.

 

También hay que evitar los postres comerciales: flan, pastel, lácteos… El postre ideal es la fruta, no abusar de fritos, salsas, hamburguesas, que tienen un alto valor calórico, recordar que los alimentos light o sin azúcar también pueden tener bastantes calorías.

 

La discusión sobre la obesidad infantil, sus causas y consecuencias, está instalándose en nuestras sociedades, aunque más no sea por efecto de demostración de los países desarrollados. Pero sorprende la coexistencia en nuestras culturas de una gran preocupación por el sobrepeso infantil al mismo tiempo que una falta de estadísticas sistemáticas y confiables sobre peso y altura de los niños en edad escolar. Es de esperar que en un futuro próximo se diseñe un programa que permita contar con información precisa sobre este tema