¿Cuál es el mejor horario para correr?

Una de las desventajas de hacer ejercicio en la noche, y que es muy común hoy en día, por el trabajo, los estudios y las ocupaciones diarias es que, si haces deporte por la noche, le mandas una señal contradictoria. Ve que no hay luz, pero percibe que estás muy activo y dispara las hormonas matutinas, lo que retrasa y dificulta el sueño, muchas personas llegan con mucha energía a su hogar y le es difícil conciliar el sueño, esto hace que no descanses bien y al otro día sentirás que no descansaste lo suficiente.

En síntesis, lo importantes es hacer ejercicio, y ver que horario te sirve más, Cualquier momento del día es el indicado para ponerse en movimiento, estar saludables, la noche hay que dejarla para cuando empieza el calor. Correr de día cuando la temperatura es alta nos deja expuestos a una pérdida de líquidos importante o a un golpe de calor. Es clave tomar bebidas deportivas si preferimos el día para una buena hidratación, es importante usar gorra si corremos al rayo del sol, y un buen protector solar, lo importante es sentirnos bien con el horario que elijamos y que se adapte a nuestros horarios.

Muchas personas se hace la pregunta ¿Cuándo es mejor correr? En las mañanas, en las tardes o en la noche, aunque no creas el horario de hacer este tipo de cardio, si influye en el rendimiento y en cómo nos sintamos, y como nuestro cuerpo reacciona ante el ejercicio dependiendo del horario.

Por ejemplo, en las primeras horas del día la temperatura corporal es más baja, lo que provoca mayor rigidez muscular. Por tanto, es bastante difícil entrar en acción, de forma que los primeros kilómetros cuestan más. Al mismo tiempo, la capacidad pulmonar es también algo inferior, independientemente del nivel del corredor. Por este motivo, es muy probable que la sensación de esfuerzo es, a menudo, más fuerte por la mañana que al final de la tarde.

Por otro lado, muchos corredores salen a correr al mediodía, antes o después del almuerzo con el objetivo de no reducir el tiempo de ocio tras la jornada laboral. En esta franja, entre la 1 de la tarde y las 4pm, el organismo, sin llegar a estar en su pico máximo, tiene un mejor rendimiento que a primera hora de la mañana, entre las ventajas de este horario destacan que deja más tiempo al organismo para digerir los entrenamientos constantes, aumentando el ritmo cardíaco, de forma que facilita conciliar el sueño por la noche.