Cinco maneras de las tan necesarias sentadillas

¡La sentadilla se hace así!. -No, se hace así-. Le ha pasado que su entrenador constantemente le repite como hacer la sentadilla correctamente. Pues tranquilos, este es posiblemente el ejercicio sobre el que más controversia existe en cuanto a su correcta ejecución. Aquí lo orientamos sobre las diferentes maneras de hacerlo.

 

 

  • La profunda. Desde una posición inicial de pie, baje completamente hasta llegar lo más cerca posible al suelo. Y vuelve a subir. Para este ejercicio podemos utilizar una barra de peso libre sobre los hombros, para mantener el equilibrio y así evitar irnos hacia atrás o doblar excesivamente la espalda.

 

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  • La semisentadilla.Esta es un poco más fácil que la anterior pues tan solo debe bajar hasta que las rodillas llegan a los 90ª y los muslos quedan paralelos al suelo. En ese momento hay que volver a subir. Esta sentadilla debido a que es más corta, le permitirá cargar un poco más de peso y estará trabajando la zona de los cuádriceps y glúteos mucho menos que la anterior.

 

  • Nalgas hacia afuera. Es una semisentadilla en la que, en la parte inferior, se flexiona la cadera y se sacan las nalgas hacia atrás. De esta forma hacemos trabajar al glúteo cuando está subiendo.

 

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  • La pistola.  Esta es una de las sentadillas más complejas porque se hace a una pierna, sin peso, pero hasta abajo. La pierna que no se apoya en el suelo debe estar extendida delante de nosotros, en forma de una pistola. Es difícil porque se debe bajar hasta el suelo y subir todo el peso con una sola pierna. ¡Poca gente lo consigue! Sin embargo usted como principiante puede apoyar una mano en un muro o silla y poco a poco ver cómo progresa.

 

  • La sencilla.Tan solo necesita el marco de su puerta y colocar sus dos manos en el marco a la altura de su cintura y flexionar las piernas hasta llegar al suelo y vuelva a subir. Con tres series de 15 segundos diarios usted podrá ver los resultados.

 

En este ejercicio lo más importante es su comodidad, así que sientase libre de hacerlo con o sin peso y siempre a una altura que a usted le quede cómodo. Si asiste a un gimnasio, tome en cuenta que puede adaptar las máquinas a su gusto.

 

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