Claves para elegir un gimnasio

La cercanía con el hogar o el centro de trabajo y la calidad de los profesionales, aspectos fundamentales a tener en cuenta.

 

Se acerca la Navidad con sus correspondientes excesos alimenticios y, tras ella, llega un nuevo año. Uno de los propósitos que siempre nos marcamos de cara a enero es empezar a cuidarnos más. Por ello, la famosa frase: “este año me apunto al gimnasio” es ya un clásico. Una vez que nos hemos decidido, llega el siguiente paso: ¿A qué gimnasio me apunto?. La elección que hagamos de uno u otro centro va a ser determinante y va a marcar nuestro compromiso y constancia a la hora de acudir a él.

 

Que esté cerca de casa o del centro de trabajo:

A veces nos dejamos impresionar por la estética del gimnasio aunque esté situado más lejos y luego, en muchos casos, la pereza de tener que desplazarnos y tener que coger el coche o el transporte público provoca que acabemos abandonando.

 

 

Calidad de los profesionales:

El alma de un gimnasio son sus trabajadores, fundamentalmente los monitores o entrenadores. Por ello, es muy importante que el centro cuente con personal debidamente cualificado que nos ayude a practicar ejercicio de forma correcta.

 

Oferta de actividades:

Es fundamental conocer bien las diferentes actividades que se imparten en el gimnasio, para saber si se adecúan a lo que estamos buscando. Es recomendable probar primero aquellas actividades en las que estés interesada. La mayoría de los centros permiten acudir a una primera clase de prueba gratuita.

 

Referencias sobre el centro:

Conviene pedir referencias sobre la instalación antes de decidirnos. Lo ideal es preguntar a amigos o compañeros de trabajo que nos comenten las ventajas e inconvenientes que pueda presentar el centro.

 

 

Calidad de las instalaciones y buen equipamiento de las mismas:

El equipamiento debe ser completo e incluir máquinas para la tonificación muscular, máquinas para el entrenamiento aeróbico, así como una zona cómoda para ejercicios de cuerpo libre y estiramiento. El aspecto del centro nos dirá si está bien cuidado o no.

 

Precio:

En la complicada situación económica que atravesamos, el dinero es también un aspecto muy importante. Es evidente que tenemos que buscar un centro que se adapte a nuestro presupuesto, pero sin olvidar nunca la calidad. La relación calidad precio debe ser equilibrada.